domingo, 31 de julio de 2011

y sin embargo...

No te pedí que aparecieras en mi vida. Tampoco te pedí que me sacaras sonrisas, que me escucharas, ni siquiera los dos besos de cada vez que nos veíamos. No te pedí que te volvieses importante, que me divirtieras con las más mínimas tonterías, que convirtieses una noche más en una noche para recordar. No te pedí que me besaras ni tampoco que me volvieras loca. No te pedí la dirección de a donde íbamos, tampoco te la di nunca yo. No te pedí ningun abrazo, ninguna caricia, ningún piropo. No te pedí que me acompañaras a casa, ni echarte de menos. No te pedí que tenga ganas de verte. No te pedí nada de todo eso, y sin embargo, lo tengo todo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario